Y finalmente, en la madrugada del pasado jueves día 30 de abril, y tras meses de gran expectación, nos llegaba la esperadísima y no menos anunciada rueda de prensa del visionario emprendedor, fundador y CEO de Tesla, don Elon Musk…. y con ella, y con el correspondiente anuncio de la llegada de unas baterías venidas de «de otro tiempo», un mar de ilusión y esperanza nos inundó.
La España renovable, otrora reina mundial de la energía solar y que actualmente transita sucumbida entre la impotencia e indignación por las políticas anti-renovables del Gobierno español , recobraba, como por arte magia, su autoestima, y bendecía alzando la voz y con tremendo optimismo, la llegada del nuevo mesías ¡¡¡ Bienvenido Mr. Tesla!!!
Unas baterías que sin lugar a dudas , han nacido con el noble y ya preconcebido objetivo de cambiar el caduco modelo energético tradicional de generación de electricidad centralizada…. Y será quizás, por la bondad de la misión, o quién sabe si por la magnitud de la tarea, que incluso el astro rey ha saludado tan magna noticia, obsequiándonos, ahí es nada, con el mes de mayo con mayor irradiación solar de los últimos ¡¡40 años!!!
Esta semana publicamos la primera parte de esta serie de dos artículos, en el que repasaremos brevemente algunas de las implicaciones y principales características de las nuevas baterías de Tesla; y con el fin de no extendernos excesivamente, dejaremos para la próxima semana, una segunda entrega en la que plantearemos un dimensionado tipo para un hogar con un consumo anual del orden de 2.500 kWh y su correspondiente análisis económico.
¿ Empezamos?
En primer lugar y más allá de creer más o menos en el potencial de las baterías, es justo reconocer que la apuesta de Tesla ha sido absolutamente disruptiva. Ya nunca nada será como antes…
Recordareis que en mi último artículo en el que os planteaba la cuestión de si había llegado la hora de las baterías, cerraba diciendo: «El autoconsumo con baterías será universal cuando se complete la curva de aprendizaje lógica que debe recorrer cualquier nueva tecnología ( en realidad las baterías de litio de pequeña capacidad no son tan nuevas), y para ello el megaproyecto de Tesla con la producción en cadena de las baterías a gran escala, será de gran utilidad para permitir, estos precios cada vez más competitivos»
Pues bien…. parece que han bastado apenas 4 semanas para recorrer buena parte de la curva de aprendizaje necesaria, pasando de los 1.000 €/kWh justo antes del anuncio, hasta los 380 €/kWh que nos propone Tesla ( 3.000 $ la batería de 7 kWh y 3.500 $ la de 10 kWh), lo que viene a suponer una reducción nada más y nada menos que del ¡¡¡¡ 62%!!!!
Y lo mejor de todo es que a partir de ahora el resto de fabricantes de todo el mundo se verán obligados a reducir precios para poder ser competitivos en el mercado, lo que lógicamente conllevará nuevas bajadas sistemáticas de precio hasta llegar a un punto de equilibrio racional con los costes reales de fabricación. Vamos a ver…
Y es que debo confesar que ¡¡¡ Me encanta Elon Musk!!!
Creo que era Albert Einstein quién afirmó que si queríamos conseguir resultados diferentes, debíamos hacer cosas diferentes… algo tan lógico y tan de sentido común, que hasta ahora tan sólo genios de la talla de Elon Musk han sido capaces de llevar a cabo, ¿ no?
Pues bien, Elon Musk, ya nos sorprendió hace algo más de un año, haciendo algo, que casi ningún empresario en su sano juicio hubiera hecho nunca, liberar sus patentes de fabricación de baterías con el objetivo de que todos los fabricantes pudieran tener acceso a ellas, y acelerar así la competitividad y la consecuente llegada masiva del coche eléctrico.
Y no satisfecho con esto, ahora va el tío y dobla la apuesta, anunciando las nuevas baterías, cuando todavía no tiene ni terminada la fábrica que debe producirlas, asegurándose un listado de más de 38.000 pedidos anticipados que le garantiza tener vendida toda su producción hasta mediados del año 2016… ¿hay mejor manera de conseguir financiación de un banco que la de presentar un listado interminable de pedidos?
En otras palabras, lo que ha hecho el bueno de Musk, es montar un Crowdfunding masivo que le ayude a financiar la construcción de su Gigafactory de baterías… lo dicho ¡¡un auténtico crack!!
Pero vayamos a la cuestión técnica… ¿qué nos propone Tesla?
Para resumir de un modo muy rápido, Tesla plantea dos soluciones distintas en función del segmento de mercado al que va dirigida:
1. Mercado doméstico.
Para consumidores domésticos, Tesla nos tiene preparado el producto bautizado como Powerwall:
- Dos tipos de baterías:
- de 7 kWh para uso diario. Admite 365 ciclos de carga-descarga anuales, y con una vida útil estimada de 15 años. Precio: 3.000 $/unidad.
- de 10 kWh solo para uso de respaldo en caso de fallo de la red eléctrica. Esta batería admite unos 50-70 ciclos de carga-descarga anuales, por lo que no está pensada ni diseñada para su uso diario. Precio: 3.500 $/unidad.
- Ambas baterías fácilmente ampliables en cascada hasta formar conjuntos de 9 baterías; por lo que llegaríamos a una capacidad de acumulación de hasta 63 kWh y 90 kWh respectivamente.
- Estas baterías pueden suministrar hasta 2 kW en régimen permanente y 3,3 kW de potencia punta con un 92% de rendimiento.
- Baterías con una alta intensidad energética y un diseño «cool», que no sólo nos permitirá almacenar energía en el mínimo espacio posible, sino que además, la querremos instalar en el comedor de casa para presumir de diseño con nuestros colegas.
- Garantía de 10 años, que nos asegura una vida útil incluso superior a las baterías solares convencionales de plomo ácido.
- Acuerdos con fabricantes de inversores de máxima calidad y garantía ( Fronius, SolarEdge, etc.. y vendrán más), que garantiza soluciones de alto valor para consumidores domésticos y comerciales.
Sin embargo, y a pesar de la magnífica primera impresión que nos han dejado estas baterías, debemos tener muy presente que de momento estamos tan sólo, ante una primera versión; lo que lógicamente, conlleva ciertas debilidades que deberán superarse más pronto que tarde. Es en este sentido que es importante destacar que a día de hoy, estas baterías no están preparadas para la desconexión total de la red eléctrica, y por lo tanto si nuestra idea va en esta dirección deberemos esperar un tiempo todavía.
Insisto, que en todo caso se trata tan sólo de una primera versión, me atrevería incluso a llamarlo un primer prototipo…. ¿ O es que a alguien le importa a día de hoy como era la primera versión del iPhone?
2. Mercado comercial e industrial.
Igualmente Tesla ha lanzado el llamado Powerpack, una solución dirigida al segmento de consumidores comerciales y/o industriales, con una capacidad de acumulación de 100 kWh.
Cada unidad de Powerpack es una cabina que admite hasta 5 racks de 100 kWh, formando unidades de hasta 500 kWh… pero lo mejor de todo es que el Powerback está diseñado para ser escalable infinitamente mediante la unión de distintas unidades de 500 kWh; o dicho de otro modos: podemos acumular 1 GWh de energía con ¡¡¡10.000 Powerpacks de 100 kWh!!!
Parece incluso que en estos momentos ya existe alguna empresa eléctrica en U.S.A que está en conversaciones para desarrollar un proyecto de generación eléctrica de 250 MW utilizando exclusivamente el Powerpack, solucionándose de este modo uno de los mayores inconvenientes de las energías renovables, su falta de continuidad.
Sin embargo una vez más, y al igual que sucede con el Powerwall doméstico, tengo que reconocer que en estos momentos existen todavía algunas sombras acerca del grado de desarrollo actual del Powerpack; o al menos, Tesla no ha proporcionado o no ha querido proporcionar mucha información al respecto, como por ejemplo, su vida útil, ciclaje, potencia pico a suministrar, potencia en régimen permanente, etc… y lo más importante, su precio; del que sólo sabemos gracias a un tweet del propio Elon Musk, en el que señala un precio de salida de 250$/kWh para grandes proyectos de generación de empresas eléctricas.
En todo caso, y al igual que con la solución doméstica, sin lugar a dudas el Powerpack es una excelente declaración de intenciones que nos iluminará con optimismo y buena energía, el camino que seguro vamos a recorrer durante los próximos años.
Y es que indudablemente, estoy convencido que con el anuncio de Tesla se han sentado definitivamente las bases de este nuevo modelo energético que tanto ansiamos. Un modelo energético basado en la generación distribuida y el almacenamiento de los excedentes de producción; en el que la red de distribución eléctrica tendrá un papel fundamental como autopista de intercambio energético entre consumidores cercanos, y para lo cual deberá recibir unos peajes justos, razonables y proporcionados al servicio que proveerá; y en el que las grandes centrales de generación deberán ser lo suficiente competitivas para ofrecer un servicio de backup a un coste también razonable, y en el que aquellas centrales menos competitivas, contaminantes, peligrosas y/o no necesarias deberán desaparecer sin contraprestación alguna…. este es el reto al que irremediablemente se enfrenta el sector eléctrico tradicional, y esperemos sepan estar a la altura de lo que demanda la sociedad, y que conceptos como el peaje de respaldo queden tan sólo, como meras anécdotas más o menos desagradables de algún ministrillo del tres al cuarto venido a más; de lo contrario, cada vez serán más los consumidores dispuestos a una desconexión total y fatal para las empresas eléctricas. Esto es lo que hay.
Hoy lo dejamos en este punto, y la semana que viene retomaremos el artículo para analizar desde el punto de vista técnico y económico, un caso tipo para un consumidor doméstico medio con un consumo anual de unos 2.500 kWh/año.
Y sobretodo recordad que, diga lo que diga el oligopolio eléctrico y haga lo que haga el señor ministro, ya nunca nada será como antes…. ¡¡será mucho mejor!!
¡¡¡ La semana que viene volvemos con más!!!
Actualización 18 de Abril 2017: En el siguiente link ( en inglés) os dejó un interesante artículo sobre la nueva generación de baterías de Tesla, que entre otras novedades duplican su capacidad e incorporan ya un inversor dentro del mismo equipo.
Hola, soy Frederic Andreu, Ingeniero Químico por el Instituto Químico de Sarriá (IQS) y post-grado en energías renovables por la Universidad Politécnica de Catalunya (UPC). Durante 10 años trabajé en Endesa Energia, primero gestionando grandes cuentas industriales y posteriormente cómo responsable de energía solar para España. Actualmente soy socio-fundador de SolarTradex y me apasiona desarrollar y compartir con todos vosotros este proyecto.
Lo interesante del asunto es que obliga a las eléctricas a repensar su modelo de negocio. Pueden amortiguar el golpe permitiendo que las redes sirvan de almacenaje y hacerse con una parte del negocio del almacenamiento, algo al estilo de almacenamiento en la nube (cobrando 15-20 euros al mes por ello por almacenar en la «nube», sale menos de lo que cuesten las baterías) o perder definitivamente el tren. En cualquier caso una respuesta en esa dirección es una buena noticia para los usuarios, que encontrarían competencia real en un mercado intervenido.
Las dudas que me surgen son básicamente ambientales: 1) de donde vamos a sacar tanto Li? i 2) son reciclables?
gran artículo!! gracias Frede!
En pocos años creo que veremos grandes cambios en el mercado eléctrico.
pues yo llevo 3 años desconectado de la red eléctrica con baterías de tracción de 30 kwh de acumulación, y salen bastante más baratas que las tesla, eso sí, no creo que aguanten 10 años con esa capacidad, espero que las de tesla cumplan lo que dicen de 10 años… aunque la intención es buena y si sienta las bases para el abaratamiento de la tecnología de litio, bienvenida sea.
365 ciclos y 15 anos de vida es un record. con technologia Li solo se puede cargar hasta 3.9V, mas alla las electrodos se deterioran. pienso no son ciclos de 80% dod (profundidad de descarga). calculamos 3.5kwh pro cyclo por bateria por dia (50% dod) , 15 anos, =19000kWhr @ $3000 = 15centimos por kWh. la mitad de plomo. de donde viene la euforia ?